:: De herencia gastronómica a visión emprendedora

Mayra Villegas

Tuxtepec, Oax.- Fátima Hernández Carrillo, originaria de Tuxtepec, Oaxaca, sabe que el camino del éxito no es fácil, tomar la decisión de hacer “algo más”, requiere de una mezcla de perseverancia, motivación y una visión emprendedora.

Hace nueve años, el hogar de Fátima albergó el inicio de un sueño, un espacio en el cual se cultivó una idea y se impulsó un proyecto, “Mole en pasta la Chinantla”, que surgió ante la inquietud de una joven estudiante y el deseo por emprender, llevar la herencia gastronómica más allá de cuatro paredes.

Mole en pasta Doña Mary

La primera vez que Fátima tuvo la inquietud de emprender fue en el Instituto Tecnológico de Tuxtepec (ITT), la idea de realizar mole en pasta nació en un proyecto de jóvenes emprendedores, sin embargo, la falta de motivación y el temor de que no fuera aceptado, le impidieron llevarlo a cabo; sin saber que tiempo después le daría grandes satisfacciones.

En el año 2009 junto a su mamá, María del Socorro Carrillo, tomó la decisión de emprender su propio negocio y crean “Mole en pasta doña Mary”. Fátima relató que en un principio una difícil situación económica por la que estaban atravesando influyó para comenzar a elaborar el mole.

La receta secreta de la bisabuela, originaria de San José Chiltepec, nueve años más tarde, se convirtió en una alternativa que hoy le permite a Fátima dar sustento a su familia y ser reconocida como una mujer emprendedora con deseos de llevar a la Chinantla más allá del Estado.

Cruzando Fronteras

El hogar de Fátima está impregnado de una mezcla de sabores que remontan a la gastronomía de la región. En el año 2011, a través del Fondo Nacional de Apoyo para las Empresas de Solidaridad (FONAES) obtuvo recursos para la construcción de un espacio y equipo de trabajo que le permitieran trabajar a mayor escala.

Con los años Fátima ganó confianza, el proyecto de una joven universitaria se hizo realidad. A partir de la creación de Mole Doña Mary asistió a varias Expo Ferias, una de ellas en el Palacio de los Deportes, donde comentó con mucho entusiasmo, que fue una experiencia muy agradable, ya que las actividades eran de jueves a domingo y para el sábado sus productos se habían agotado.

La pasta de Mole traspasó fronteras y logró incursionar en el mercado de Cancún, pero Fátima quiere más, expresa no es suficiente. “El emprender no es fácil, estoy apostándole a que vamos a crecer, a que no me voy a quedar nada más aquí todavía falta mucho camino por recorrer, todo requiere de constancia y perseverancia” comentó.

Fátima está motivada a continuar sus sueños, pero en el camino se ha enfrentado a obstáculos, cuando “Mole doña Mary” empieza a ser preferido por el mercado local se encuentra con que no pudo ser registrado por la similitud del nombre con otro ya conocido y registrado, por ello surge “Mole en pasta la Chinantla”.

Mercado local, consumidor difícil

Como emprendedora Fátima se enfrentó al rechazo en Tuxtepec, algunas cadenas de tiendas y supermercados respondieron con una negativa a la comercialización de sus productos, con el argumento de que solo venden marcas reconocidas.

“Si caes, te levantas”

A pesar de las adversidades, Fátima valora a quienes han confiado en ella y no olvida que los primeros en hacerlo fueron los mini súper Moreno, abarrotes Gloria y Frutilandia, cuando solo producía mole, en diez años espera estar presente en los estados cercanos a nuestra región y poder dar empleo a más personas.

De la idea al producto:

• Mole en pasta la Chinantla
• Cacahuates con ajo y chile
• Salsa macha
• Frijoles negros refritos

En voz del emprendedor:

“Busquen una idea que ustedes mismos puedan hacer y sobre todo que amen lo que hacen”.